y quizá debí pedir que te quedaras, pero en el fondo ¿cuánto tiempo te ibas a quedar?
intenté autoconvencerme de que quizá las cosas funcionarían pero en el fondo de mi alma de niña ilusa sabía que lo nuestro tenía fecha de caducidad, y que el término llegaría más temprano que tarde.
y es que creo que es mejor que ocurra temprano, que tarde.
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